¿Qué es una relación tóxica?
Es el tipo de relación donde uno de los miembros genera malestar constante a la otra persona debido al desarrollo de ciertas dinámicas que pueden llegar a generar maltrato psicológico y físico.
Así mismo, debes saber que las relaciones tóxicas se pueden generar en las relaciones entre amigos, familiares, de trabajo y amorosas, al igual que existen diversos tipos de relaciones tóxicas.
En la mayoría de los casos, el miembro de la relación que recibe el maltrato no es consciente de lo que esta pasando, a pesar de que sus amigos y familiares pueden intentar constantemente demostrar las actitudes y conductas de abuso de la pareja.
Parte de esto puede deberse a la normalización y la tendencia a romantizar actitudes tóxicas, por ejemplo: cuando nuestra pareja nos impide salir a una reunión solos, podemos pensar que es porque nos quiere proteger o no quiere compartirnos y es tierno, pero realmente no es una actitud adecuada y considerarla de esa forma termina validándola como sana ante el público y la pareja misma.
¿Cómo se si estoy en una relación toxica?
A continuación, te mencionamos algunas de las principales señales que te permitirán identificar si te encuentras en una relación toxica:
- No le gusta que estés con tu amigos/as
- Vigila y controla tus gastos, aun sin tener necesidad de ello
- Toma decisiones con respecto a tu vida sin considerar tu opinión
- Desvaloriza e ignora los planes, metas y sueños que tengas
- Ignora y minimiza tus problemas y quejas
- Minimiza tus virtudes
- Revisa tus redes sociales y teléfono celular sin respetar tu privacidad
- Exige compensaciones por los favores que te hace
- Te da a entender que sin él/ella no serias nada
- Te reprende o cuestiona cuando das tu opinión sobre un tema estando con familiares o amigos
- Utiliza chantaje emocional frecuentemente
- Sus celos son elevados, llegando a prohibir compartir tiempo con personas del sexo opuesto
- Es paternalista/maternalista
- Trata de influir en tu forma de vestir y/o comportarte
- En una discusión, siempre debes ceder tú, de lo contrario se molesta mucho y puede pasar días ignorándote
- Te culpa de los problemas que tiene en su vida laboral/social
- Se enfada cuando comenta los problemas con tu familia y/o amigos (especialmente si tienen que ver con tu relación), lo que genera que evites comentar sobre ellos con tus allegados
- Evitas tratar ciertos temas con él/ella porque sabes que su reacción no será positiva
- Te chantajea o exige que tengas relaciones sexuales que no deseas realizar
- Accedes a tener relaciones sexuales solo para satisfacer o evitar molestarlo
- Te compara con parejas sexuales anteriores
Es posible que en algún momento tanto tú como tu pareja hayan realizado alguna de las acciones antes descritas y es normal que se cometan errores o se actúe de forma poco adecuada, por eso mismo hay que tener cuidado al momento de enjuiciar a nuestra pareja o a nosotros mismos.
Se puede considerar tóxica cuando se presentan de forma reiterativa y habitual las señales comentadas.
Cómo salir de una relación tóxica
Lo primero que debes saber es que lograr salir de una relación tóxica es un proceso paso a paso que amerita esfuerzo, toma de conciencia y voluntad para conseguirlo.
Y es importante que sepas que no estás solo/a en esto, aunque algunos de tus amigos y/o familiares se hayan cansado de advertirte lo que sucedía recuerda que ellos estarán para ti cuando solicites ayuda, no dudes en recurrir a ellos.
Algunas de las cosas que debes hacer para lograr salir de una relación toxica son:
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Dejar la negación:
El primer paso para salir es aceptar que estas en una relación tóxica.
Es momento para pensar y analizar las opiniones de tus amigos y familiares, que aunque en principio no considerabas acertadas, ahora es momento para compararlas con la realidad pues por alguna razón lo están indicando.
Así mismo, hazte preguntas sobre cómo te sientes cuando sucede algo de lo que ellos dicen, como crees que te ve esa persona, como se comporta en tus momentos de alegría y sufrimiento, como te sientes cuando estas por verla/o, si tienes deseos de pasar tiempo juntos.
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No te consideres culpable de la relación:
Aceptar que no es tu culpa cuando te señala por el rumbo de la relación y los sucesos.
Recuerda que la relación no se basa en una sola persona, es un trabajo en equipo y la acción de ambos genera efectos en ella.
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Identifica las conductas y/o actitudes tóxicas tanto tuyas como de tu pareja:
Es probable que hayas reconocido aunque de forma débil cuales son los comportamientos o actitudes tóxicas de tu pareja, pero quizás haz buscado justificación para las mismas.
Ante esto debes ver desde otra perspectiva esos comportamientos, pues te ayudaran a que tomes conciencia de lo que sucede y validar la decisión de querer alejarte de esa persona.
También hay que analizar sobre algún comportamiento tuyo en la relación que pueda haber ocasionado algún problema, no con el fin de justificar las acciones, sino de reconocer que en ocasiones nosotros también hemos tenido actitudes tóxicas con respecto a nuestra pareja.
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Reconoce que mereces algo mejor:
Muchas veces la razón por la cual continuamos dentro de una relación tóxica es porque creemos que no conseguiremos nada mejor y debemos agradecer y/o conformarnos con la pareja que tenemos en este momento, por lo cual consideramos que debemos soportar muchas conductas y actitudes no adecuadas.
Sin embargo, no es así, si te causa sufrimiento no es bueno para ti y no es lo que te mereces, aunque de miedo buscar lo desconocido, es la mejor opción que se tiene para protegerte y darte cuenta de que mereces cosas mejores.
¿Por qué son tóxicas algunas relaciones?
Una de las razones por la que se vuelven tóxicas puede deberse a los acontecimiento en las interacciones de nuestra infancia que generan en nosotros problemas al momento de relacionarnos.
A veces no nos percatamos del mal que esto nos ha generado hasta que es tarde y es normalmente cuando surge algún problema que nuestra forma de actuar se ve determinada por esto.
Se puede observar en ambos miembros de la relación. Esto no quiere decir que sea tu culpa o que es lo que te mereces, sino que las razones son más complejas de lo que podemos ver a simple vista.
Para hacerlo más concreto, pongamos un ejemplo:
Un hombre que fue abandonado por su figura materna en la infancia, puede creer que fue su culpa y que siempre lo abandonarán, por ende, cuando esté en una relación, es probable que trate de quedarse en ella aunque su pareja tenga conductas tóxicas para evitar ser abandonado por un ser querido nuevamente.
Además, puede considerar que es la única forma de no “perder al otro” y si sucede será por su “culpa” como pasó con su figura materna.
El temor a que se repita el evento puede generar una percepción diferente de la realidad y llegar a considerar que siempre va a pasar así, por lo cual, deberá esforzarse y aceptar lo que ocurra en la relación para evitar que lo abandonen.
El ejemplo anterior lo podemos utilizar también para entender el punto de vista de la pareja tóxica, podemos suponer lo siguiente:
En este caso la persona abandonada puede considerar que si su pareja conoce a otro que sea mejor que él podrá perderla y por ende tratará de evitar que esto suceda controlando sus salidas y sus relaciones sociales tanto de forma presencial como a distancia (redes sociales, teléfono celular, etc.).
Todo eso con el fin de no ser abandonado y poder hacer algo para evitarlo, al contrario que en su infancia donde puede considerar que fue su culpa y que no “hizo nada” para evitarlo.
Debemos entender que todos tenemos dificultades que se plasman a lo largo de nuestras vidas, identificar las mismas permitirá no solo salir de la relación toxica, sino entender qué sucede para trabajar en ello y romper el patrón.